El Sistema de Control de Importaciones (ICS), implantado en 2011 por la Unión Europea, fue una primera respuesta al contexto global posterior al 11-S. Su objetivo principal era reforzar la seguridad de las fronteras europeas exigiendo que cualquier mercancía con destino a la UE fuera notificada con antelación a través de una Declaración Sumaria de Entrada (ENS). Este sistema permitía a las autoridades realizar análisis de riesgos antes de que la carga llegara al territorio comunitario.
Sin embargo, con el paso del tiempo, el ICS quedó obsoleto. Su arquitectura técnica era rígida, estaba descentralizada entre los diferentes Estados miembros y no respondía a las nuevas exigencias del comercio global. En un mundo dominado por la automatización, el comercio electrónico, la trazabilidad y la necesidad de anticipación logística, la Comisión Europea decidió dar un paso adelante: nació el ICS2.
¿Qué es el ICS2 y por qué deberías prestarle atención ahora?
Desde junio de 2024, cualquier empresa que quiera introducir mercancías en la Unión Europea por vía marítima está obligada a cumplir con el ICS2, el nuevo Sistema de Control de Importaciones. A partir de abril de 2025, esta normativa se extenderá también al transporte por carretera y ferrocarril. ¿Qué significa esto en la práctica? Que antes de que un contenedor ponga un pie —o una quilla— en suelo europeo, las autoridades aduaneras deben haber recibido una ENS con información completa y precisa sobre la carga.
Este nuevo sistema no solo refuerza la seguridad, sino que reorganiza completamente el flujo de datos. El ICS2 centraliza la información en una plataforma única europea, agiliza el intercambio con los operadores y permite a los 27 Estados miembros acceder a los mismos datos en tiempo real.
¿Qué desafíos plantea el ICS2 para las empresas exportadoras?
El impacto es tan técnico como estratégico. Uno de los mayores desafíos que hemos detectado es la exigencia de precisión. La ENS ya no puede contener descripciones genéricas del tipo “ropa” o “componentes industriales”. La UE exige descripciones detalladas y codificadas conforme a los estándares armonizados. No cumplir con este nivel de detalle puede derivar en el rechazo de la declaración, con el consiguiente bloqueo del envío.
Otro reto no menor es la necesidad de digitalización. Las empresas deben ser capaces de enviar la información requerida a través del Shared Trader Interface (STI) o mediante el Portal del Operador Económico. Esto implica una actualización tecnológica, especialmente para pymes exportadoras que hasta ahora podían operar sin grandes exigencias en sistemas informáticos.
Y no olvidemos el factor humano: el personal logístico y documental debe estar capacitado para preparar estas declaraciones conforme al nuevo estándar. Un error en la declaración puede provocar no solo retrasos, sino sanciones. Si estás exportando regularmente a Europa, cada envío será una prueba de fuego para tu capacidad de adaptación.
¿Cómo afecta el ICS2 al transporte marítimo y a la logística internacional?
Desde el punto de vista del transporte marítimo, el ICS2 introduce un elemento de anticipación crítica. Los datos deben presentarse antes de que el buque zarpe del puerto de salida, especialmente si hablamos de puertos extracomunitarios. Para las líneas navieras, esto implica coordinarse estrechamente con los cargadores y transitarios, asegurándose de que toda la documentación esté en regla con mucha antelación.
Además, estamos viendo un cambio en la naturaleza de la responsabilidad. Con el ICS2, todos los actores de la cadena —desde el exportador hasta el operador logístico— tienen un rol activo y legalmente exigible en la transmisión de datos. Si uno falla, todos fallan. Esto afecta especialmente a las empresas que exportan bienes de alto valor o que requieren una logística just in time, como componentes electrónicos, maquinaria o moda. Un error administrativo puede convertirse en un cuello de botella logístico que comprometa toda la cadena de suministro.
Deja que Kokargo te ayude
Desde Kokargo, creemos que la adaptación al ICS2 no debe verse como una carga, sino como una oportunidad para profesionalizar y robustecer la operativa logística. Como Operador Económico Autorizado (OEA), en Kokargo ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de externalizar completamente la gestión del ICS2. Nos encargamos de preparar y presentar la Declaración Sumaria de Entrada (ENS) en su nombre, asegurando el cumplimiento normativo, la calidad de los datos y la trazabilidad de la información. Esta figura nos permite actuar como interlocutor directo con las autoridades aduaneras europeas, agilizando el proceso y evitando errores que puedan generar retrasos o sanciones. Para las empresas exportadoras, contar con un partner certificado como Kokargo es una garantía de seguridad y eficiencia operativa en un entorno cada vez más regulado.