Tipos de puertos marítimos: clasificación y ejemplos destacados en el comercio internacional

Los puertos marítimos son infraestructuras esenciales que facilitan el comercio internacional, la movilidad de personas y el desarrollo económico de las regiones costeras. Su clasificación puede abordarse desde diversas perspectivas, atendiendo a factores como su función principal, la gestión administrativa, la conectividad y la titularidad. A continuación, exploraremos estas categorías con ejemplos representativos.

Clasificación según su función principal

Los puertos pueden tener distintos usos según el tipo de mercancías, pasajeros o actividades económicas que manejan. Esta es la forma más habitual de clasificarlos, ya que cada puerto se diseña para atender necesidades específicas.

  • Puertos comerciales: Se centran en el manejo de mercancías y pasajeros. Ejemplos destacados son el puerto de Shanghái en China y el puerto de Róterdam en los Países Bajos.
  • Puertos industriales: Diseñados para servir a industrias específicas, facilitando la importación de materias primas y la exportación de productos elaborados. Un caso notable es el puerto de Kawasaki en Japón, que apoya a las industrias siderúrgicas y petroquímicas locales.
  • Puertos pesqueros: Destinados a la actividad pesquera, incluyendo la descarga, procesamiento y comercialización de productos marinos. El puerto de Vigo en España es un ejemplo relevante en este ámbito.
  • Puertos turísticos o deportivos: Concebidos para el atraque de embarcaciones de recreo y cruceros, fomentando el turismo y las actividades náuticas. El puerto de Miami en Estados Unidos es conocido como la “Capital Mundial de los Cruceros”.
  • Puertos militares: Utilizados por las fuerzas navales para operaciones estratégicas y de defensa. La base naval de Norfolk en Estados Unidos es la instalación naval más grande del mundo.

Clasificación según la titularidad

Los puertos pueden ser públicos, privados o de uso mixto, dependiendo de quién es el dueño de sus instalaciones.

  • Puertos públicos: Propiedad de entidades gubernamentales, ya sean nacionales, provinciales o municipales. El puerto de Buenos Aires en Argentina es un puerto público gestionado por el Estado.
  • Puertos privados: Propiedad de empresas o individuos, generalmente construidos para servir a necesidades específicas de una industria o corporación. Un ejemplo es el puerto de Tubarão en Brasil, propiedad de la empresa minera Vale.
  • Puertos mixtos: Combinan inversión pública y privada, como el Puerto de Santos en Brasil, gestionado en un modelo mixto entre el Estado y operadores privados, o el Puerto de Hamburgo en Alemania, con un modelo con participación pública y privada.

Clasificación según la gestión administrativa

Estos modelos reflejan diferentes grados de participación estatal y privada en la gestión portuaria. En general, el modelo landlord es el más común a nivel global, ya que equilibra la supervisión pública con la eficiencia privada. Sin embargo, países con economías más centralizadas continúan apostando por los puertos ‘operating’ para mantener el control estatal sobre infraestructuras estratégicas.

  • Puertos ‘landlord’: la infraestructura del puerto es propiedad del Estado o de una autoridad portuaria pública, pero las operaciones como la carga y descarga son gestionadas por empresas privadas mediante concesiones. Es el modelo más extendido en Europa y en muchas partes de Asia.
    • Puerto de Róterdam (Países Bajos): La Autoridad Portuaria de Róterdam es de titularidad pública, pero las terminales están operadas por empresas privadas como APM Terminals, DP World y Hutchison Ports.
    • Puerto de Barcelona (España): Sigue el modelo ‘landlord’, donde la infraestructura es gestionada por la Autoridad Portuaria de Barcelona, pero las terminales de contenedores y pasajeros son operadas por compañías como Hutchison Ports BEST y APM Terminals Barcelona.
    • Puerto de Singapur: A pesar de ser uno de los puertos más eficientes del mundo, las terminales son operadas por empresas privadas como PSA International y Jurong Port, bajo concesión de la Autoridad Marítima y Portuaria de Singapur.
  • Puertos ‘tool’: en este modelo híbrido, la infraestructura y parte del equipamiento (como grúas o muelles) son de propiedad estatal, pero las operaciones de carga y descarga son gestionadas por empresas privadas. Esto permite mantener cierto control público mientras se aprovecha la eficiencia privada.
    • Puerto de Amberes (Bélgica): La Autoridad Portuaria de Amberes proporciona las instalaciones y el mantenimiento, mientras que operadores privados como PSA Antwerp y DP World Antwerp se encargan de la manipulación de la carga.
    • Puerto de Montreal (Canadá): La infraestructura es pública, pero varias terminales son operadas por empresas privadas como Termont Montreal y Montreal Gateway Terminals Partnership bajo un modelo ‘tool’.
    • Puerto de Buenos Aires (Argentina): La Administración General de Puertos (AGP) es responsable de la infraestructura, pero las terminales están en manos privadas.
  • Puertos ‘operating’: este modelo es menos común en países con economías abiertas, ya que el gobierno controla directamente tanto la infraestructura como las operaciones portuarias. Suele aplicarse en economías planificadas o países con una gran influencia estatal en sectores estratégicos.
    • Puerto de La Habana (Cuba): Gestionado íntegramente por el gobierno cubano a través de la empresa estatal Empresa Terminal de Contenedores de La Habana (ETCH), sin participación de operadores privados.
    • Puerto de Shanghái (China): A pesar de ser el puerto más grande del mundo, gran parte de sus operaciones son controladas por la empresa estatal Shanghai International Port Group (SIPG), que gestiona directamente terminales y operaciones.
    • Puerto de Chittagong (Bangladés): La Autoridad Portuaria de Chittagong se encarga de toda la gestión y operación del puerto, sin concesión a empresas privadas.

Clasificación según la conectividad

Algunos puertos se centran en el comercio local, mientras que otros están diseñados para el tráfico internacional de grandes embarcaciones.

  • Puertos de cabotaje: el cabotaje es el transporte de mercancías o pasajeros entre puertos de un mismo país, sin cruzar fronteras internacionales. Se realiza dentro de aguas territoriales y suele estar regulado por leyes nacionales que pueden restringir la participación de navieras extranjeras en este tipo de rutas. Este tipo de puertos atienden embarcaciones que operan entre puertos del mismo país, facilitando el comercio interior y la distribución regional. Un ejemplo es el puerto de Chetumal en México, que maneja tráfico nacional.
  • Puertos de altura o de aguas profundas: diseñados para recibir embarcaciones que realizan rutas internacionales, manejando grandes volúmenes de carga y pasajeros. El puerto de Los Ángeles en Estados Unidos es un claro ejemplo de puerto de altura.

La clasificación de los puertos marítimos es multifacética y refleja la diversidad de funciones y estructuras administrativas que existen en el ámbito portuario. Comprender estas categorías es esencial para apreciar el papel crucial que desempeñan los puertos en el comercio internacional y en el desarrollo económico regional.