El puerto de Oranjestad se encuentra en la capital de Aruba, en el extremo suroeste de la isla, lo que lo convierte en un punto clave para las actividades comerciales y turísticas del país. Está ubicado a solo 4 kilómetros del Aeropuerto Internacional Reina Beatrix, lo que facilita la conexión entre el tráfico marítimo y aéreo. Además, está a unos 2 kilómetros del centro de la ciudad, lo que lo hace muy accesible tanto para mercancías como para pasajeros.

Este puerto ha sido históricamente crucial para la economía de Aruba. Fue establecido cerca de 1796, junto al Fort Zoutman, y ha evolucionado desde su papel inicial como un punto para la cría de caballos hasta convertirse en un puerto moderno que maneja tanto mercancías como turismo. En la actualidad, la mayor parte de las operaciones de carga se han trasladado al puerto de Barcadera, ubicado a pocos kilómetros de Oranjestad, lo que ha permitido que el puerto en la capital se concentre más en operaciones de cruceros y tráfico de pasajeros. Aunque se concentra en la recepción de grandes cruceros, mantiene una rica historia relacionada con la evolución económica de la isla. Desde la era colonial hasta el presente, el puerto ha jugado un papel fundamental en la conectividad de Aruba con el mundo.

Los productos que se mueven a través del puerto de Oranjestad incluyen mercancías importadas principalmente desde los Países Bajos, Estados Unidos y Venezuela. Estos productos abarcan desde bienes de consumo hasta materiales industriales y combustibles. Las exportaciones, por otro lado, van dirigidas principalmente a los mismos países, siendo los productos refinados de petróleo uno de los principales elementos que salen de la isla.